Dentro de gigantescas y pesadas cajas se esconde una familia de juegos cooperativos de zombis, ambientados en la edad media y en la actualidad. En el primer caso, nos encontramos con héroes que son magos lanzadores de hechizos, elfos arqueros o monjas sanguinarias, que luchan contra hordas de zombis ataviados con ropaje medieval. En el segundo, los héroes y zombis son más clásicos, mientras que en el equipo podremos encontrar la mítica motosierra.

Tras seleccionar y configurar uno de los escenarios que presenta el juego, nos encontraremos que la mecánica de juego es extremadamente sencilla. Cada héroe dispone de 3 acciones, que podrá utilizar para moverse, atacar a los zombis y buscar equipo, entre otras menos utilizadas. Por supuesto, cada héroe podrá ir descubriendo equipo y armas más potentes, que le permitan ser más efectivo a la hora de eliminar enemigos.

Cada escenario tiene un trasfondo algo distinto, pero básicamente el objetivo del juego es similar en todos ellos: recoger un cierto número de objetivos y/o escapar, a la vez que se eliminan a más y más zombis.

Un juego que es pura diversión, donde no hay que pensar demasiado y el azar está muy presente mediante dados y robo de cartas.

Samurai Sword es un juego de roles ocultos que toma la mecánica ya utilizada en el mítico Bang! de cartas, y traspasa la ambientación del oeste americano al Japón feudal. Así mismo, consigue que no haya eliminación de jugadores, corrige diversos aspectos del original del oeste y reduce su duración.

Cada jugador será un personaje (visible para todos los jugadores), que le dará una habilidad especial y determinará el número de vidas de las que dispone. Así mismo, se repartirá un rol (oculto al resto de jugadores) que determina en qué bando lucha el jugador en esa partida. Uno de ellos habrá recibido el rol de shogun, y será el único que empiece con su rol mostrado a todos. Cada jugador recibirá además y determinado número de puntos de honor, que será la medida que determine el final el ganador de la partida.

Existen 3 bandos, los samurais forman equipo con el shogun, los ninjas van juntos y el ronin formará equipo él sólo. La mecánica central el juego son las cartas, el jugador en turno (empezando por el shogun), robará dos cartas al principio del turno y podrá jugar cualquier número de ellas en su turno. Hay cartas de efectos especiales que obligan a descartar o robar cartas al resto de jugadores, efectos permanentes, que dan beneficios a los que las juegan hasta que se descartan, y hay armas, que permiten atacar a otros jugadores con un determinado rango y daño. El ataque siempre puede anularse gastando una carta de parada.

Cuando un jugador pierda su último punto de vida, le entregará un punto de honor al jugador que lo provocó. Así mismo, cuando se agote el mazo de robo, cada jugador perderá un punto de honor. En cuanto un jugador pierda su último punto de honor, la partida termina y se cuentan puntos. Cada bando sumará todos sus puntos de honor en conjunto, con una serie de multiplicadores. Así por ejemplo el ronin, que es el único de su bando, multiplicará los puntos de honor que haya conseguido por un número creciente que depende del número de jugadores. El bando que más puntos de honor consiga, será el ganador en equpo.